El popular cantante cubano —naturalizado italiano— Paulo FG estrena video clip y promociona su venidera gira por tierras del norte. Para matar el aburrimiento vespertino, escuché la canción, que no está ni mal ni bien, pero cuyo video hizo que me saltara una liebre. De tal suerte, invito a los lectores a que le echen un vistazo y respondan el siguiente cuestionario:
La obsesión con el juguito de naranja y el plato de frutas (que aparecen una y otra vez en el clip) es:
a) una provocación a los televidentes cubanos;
b) un acto de diversionismo ideológico (contra el sistema socialista y, peor aún, contra el sistema digestivo);
c) más que la pretendida mansión con su escalera acaracolada, la bella modelo, las ropas que quieren ser de marca, las gafas que limitan el acceso a los ojos del cantante, la cadena de oro que casi lo asfixia, la piscina con forma de ameba y hasta la existencia del video mismo… una muestra del casi inalcanzable status del susodicho;
d) todo lo anterior;
e) todo lo anterior y más.
martes, octubre 28, 2008
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6 comentarios:
(e)... y ese "más" es la convicción de que Paulito no tiene menos talento que cualquiera de los "salseros románticos" boricuas, ni es menos original, ni tiene menos buen gusto.
A su favor hay que anotar que en este nuevo trabajo resulta evidente la asesoría estética de algunos singuristas* de su país adoptivo.
* Fusión nominativa, sinónimo de turigante.
Primera vez que lo veo, siempre estoy "atrás del palo".
Parodiando el título:
Confió en Güicho que sabe mucho de todo y digo (e)... es verdad que suena muy boricua.
Saludos
F.C.
Como F.C., tampoco lo había oído nombrar hasta ahora así que somos dos detrás de la guásima. Además, al principio no se sabe si está cantando o mascando chicle. ¿Y él es pariente melódico de NG La Banda? ¿A qué viene esa G?
f)El video con el tipo incluido son cheisimos...
N
Te quiero y te adoro, pero en vista de los comentarios anteriores, no pienso ver el video. Dejo el comentario opara hacer como el gallego.
Yo sí lo había oido en Cuba, qué pena, yo creo que en verdad, se fumó la guásima de Teresa D. No era tan malo.
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